agosto 27, 2008

Vacaciones en Júpiter

Su cordón se cortó y quedó a la deriva. Orbitando, sin posibilidad de ayuda.
Ante ríos de nubes, vapores y ciclones, suavemente retocados por pinceladas de acuarelas rojas y naranjas. Circulando y diluyéndose.
Y un cielo minado de lunas.
Perdido en la inmensidad; en profundo silencio.
Flotando así... hasta desvanecerse.


1 comentario:

Anónimo dijo...

¿Ni siquiera pidió un giro?

 


Minisagas está licenciada bajo una Licencia Creative Commons Atribución-No Comercial-Sin Obras Derivadas 3.0 Unported.